Fríos o calientes, nos sacan de apuros con rapidez y son deliciosos. Ocupan un lugar de honor en el mundo gourmet, y sus ingredientes pueden ser maravillosos. ¡Sólo usa tu imaginación!
Rellenos con un toque deli
El jamón sigue siendo el ingrediente más usado, pero dale un nuevo giro: busca los especializados, como el curado y dulce Honey Ham con jarabe de abeto, o el italiano tipo prosciutto. Esto va mano a mano con distintos tipos de quesos, como el clásico suizo o gruyer, el italiano mozzarella, el inglés cheddar, el español manchego, el popular american cheese, el roquefort o cabrales, y muchos más. Incorpora productos como carnes curadas o salumi italianas, como la mortadela o el salami; la charcuterie francesa como el paté, así como maravillas en materia de mostazas y aliños.
Tip: Para una rica mezcla de sabores y texturas añade frutas a los sándwiches, por ejemplo, rebanadas de manzana con otras de queso cheddar.
Opciones calientes
• Prueba un sándwich en pan francés o en un panecillo portugués alargado, relleno de albóndigas en salsa, calamares fritos (¡el bocadillo favorito de Madrid!), pollo a la parrilla o pescado empanizado con salsa tártara. • El italiano veal cutlet parmigiana (ternera empanizada con queso mozzarella) es muy popular en Estados Unidos. • El delgado y crujiente panini (y los panecillos pita) con distintos rellenos y untados con crema de hummus, como el falafel del Medio Oriente, son muy habituales. • Igual de fabuloso es el cubano, una especialidad de Miami que se come en todo el mundo y se prepara con lascas de jamón, queso suizo, cerdo asado y pepinillo encurtido, todo en pan cubano (parecido al pan francés) y tostado a la plancha. La medianoche es un sándwich cubano en un panecillo de huevo planchado. • ¿También deliciosos? El bocadillo de chorizo español o choripán y los divinos croque monsieur y croque madame (éste lleva un huevo frito) franceses.
¿ Lechuga sí o no?
Añadir esta hortaliza y jitomate a los bocadillos da un toque crujiente y fresco, excepto en los sándwiches tostados o calientes que no lo necesitan. Es habitual rellenar los emparedados con vegetales en rebanadas finas, casi como una juliana de zanahorias, apio o calabacitas, cuya mezcla contrasta a la perfección con la textura más suave de ensaladas de atún o langosta. ¿Cuál es tu favorito?
Por: Mari Rodríguez Ichaso / Foto: Archivo
