Es uno de los alimentos favoritos en América Latina y un tesoro nacional en la gastronomía española. Aquí te diremos cuáles son las mejores y cómo disfrutarlas.
Estas diminutas porciones rellenas, pero con mucho sabor, ya sea en forma alargada o redonda, y rebozadas con huevo batido y polvo de galleta o pan molido, son la sensación a nivel mundial y es que al estar fritas quedan doradas y crujientes dando pie a una experiencia culinaria única. Su relleno usualmente es de carne, pollo, jamón y pescado, unido por salsa Bechamel. No obstante, hoy día son muy populares las de verduras ¡y hasta de frutas!
Las más internacionales
Increíble pero cierto: hay sitios exclusivos para este platillo. El bar madrileño Solo de Croquetas (Calle de Echegaray, 5) sirve versiones muy gourmet y sin gluten, con originales combinaciones de ingredientes y sabores, como la croqueta de empanada gallega. En el Mercado de San Miguel, también en Madrid, el carrito de croquetas vascas Arzábal es maravilloso. En Ámsterdam, el Bar Oldenhof (Elandsgracht 84) tiene unas deliciosas de camarones, y en Miami, Dos Croquetas (10505 SW 40th St) tiene mucho éxito gracias a presentaciones tan variadas como cerdo rostizado, queso suizo, mostaza ligera y encurtidos tostados.
¿De dónde provienen?
Aunque no hay un consenso, dicen que fueron creadas por el cocinero francés Louis de Bechamel en la corte de Luis XIV (de ahí el nombre de la famosa salsa!). No obstante, afirman que su origen está en los cocineros italianos de Catalina de Médici antes de su boda con el rey de Francia en 1533. Lo cierto es que se hicieron famosas en París en 1817, cuando el chef Antoine Cámere sirvió a un royal ruso “croquettes a la royale”, al recubrir la pasta de bechamel y jamón con un empanizado crujiente.
Receta básica para prepararlas
1. Muele y mezcla a la perfección los ingredientes del relleno escogido. 2. Cocínalos en una sartén a fuego mediano; mezcla continuamente hasta formar una ‘pasta’ que se despegue del fondo. 3. Añade la cantidad de salsa Bechamel que desees. Mientras más le agregues, más cremosas serán. 4. Rectifica la sazón, agrega sal, pimienta y especies a gusto, de ser necesario. 5. Refrigera la pasta de las croquetas para que se endurezca un poco antes de darles forma y rebozarlas. ¡Será más fácil así! 6. Si las pasas dos veces por huevo batido y pan molido, guardarán mejor su forma al freírlas en aceite caliente. Ya rebozadas, refrigéralas durante una hora al menos antes de freír. 7. Al sacarlas de la sartén, colócalas en toallas de papel para absorber el exceso de grasa. ¡Disfruta!
La palabra croqueta viene de “croquer” (crujir) y en Francia la llaman croquette. En Holanda es kroketten o kroket , en Japón korokke (la comen rellena de pescado o de puré de patatas), mientras que en Portugal es croquete y en Alemania kroketten.
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¿Las combinaciones más populares?
Utilizando una receta tradicional, puedes crear mezclas fantásticas para conquistar el paladar de tus invitados.
Con influencia española Cocido y fabada.
A la italiana Arroz con carne molida, risotto, papas (hechas puré y con queso).
Con vegetales Setas, champiñones, coliflor, alcachofas, brócoli, acelgas y espinacas con queso.
Con quesos Roquefort, idiazábal, parmesano, Cabrales, provolone con tomates y albahaca.
Con mariscos Bacalao, chipirones en su tinta, camarones y bonito.
Con charcutería Jamón ibérico, chorizo, morcilla, sobrasada y salchicha.
Cremas dulces Natilla, arroz con leche o chocolate.
¿Cuáles son tus favoritas?