El actor explicó que su esposa, Rita Wilson, fue golpeada con más dureza por la enfermedad y ha vuelto a alabar al equipo médico que se encargó de tratarlos a ambos en Australia.
El actor Tom Hanks volvió a expresarse públicamente sobre la insólita experiencia que tuvo que atravesar por culpa del temido coronavirus, una serie de contratiempos que compartió con su esposa Rita Wilson, también infectada, en tierras australianas, donde se encontraban ambos con motivo de las labores de preproducción de la próxima película del intérprete.
Por medio de su intervención en el programa de radio The National Defense, el astro de Hollywood dio a conocer que los síntomas de la enfermedad padeció la también actriz fueron mucho más graves que los suyos, hasta el punto de que tenía que gatear para trasladarse de la cama al baño y viceversa. Asimismo, el artista volvió a dar las gracias al servicio médico que los atendieron y, por supuesto, a la propia Rita por contribuir a que el aislamiento fuera algo más llevadero.
“La verdad es que Rita lo pasó mucho peor que yo, su fiebre fue mucho más alta y también sufrió otros efectos. Perdió por completo los sentidos del gusto y del olfato. Durante buena parte de las tres semanas no podía disfrutar en absoluto de la comida. Tenía náuseas con frecuencia y no podía hacer otra cosa que arrastrarse por el suelo para poder ir al baño. Fue todo más largo de lo esperado”, explicó el artista de 63 años en su aparición radiofónica. “El personal que nos atendió tuvo mucha paciencia conmigo. Una enfermera me preguntó un día que cómo me encontraba y le contesté: ‘Me está pasando algo rarísimo, he intentado hacer unos estiramientos básicos y no he podido ni con la mitad’. Se me quedó mirando a través de sus lentes como si estuviera hablando con el hombre más tonto del mundo y se limitó a responder: ‘Es que tienes Covid-19'”, bromeó en la misma conversación.