El actor conversó con VANIDADES acerca de su familia, su trabajo y el personaje de Patrick Jane en El mentalista, que le ha dado fama mundial
Amable, simpático, cortés, bien informado, con chispa. Resulta agradable conversar con Simon Baker, quien a sus 43 años es una de las figuras más populares de la televisión estadounidense, hecho que no parece haber afectado su manera de tratar a los demás. Fuimos presentados en Los Ángeles con motivo del lanzamiento de Gentlemen Only, la más reciente fragancia masculina de Givenchy. Después se unió al grupo de periodistas en el coctel: insólito, estuvo con su hija Stella -de 19 años- compartiendo en pequeños grupos, intercambiando amigablemente.
Al día siguiente nos recibió con calidez para la entrevista. Como un buen anfitrión, me preguntó: "¿Qué quieres beber?”, de inmediato sirvió un vaso con agua y nos sentamos a conversar como dos viejos conocidos? Compartí con él mi sorpresa acerca de la noche anterior y respondió con naturalidad: “En este momento de mi vida estoy ocupado porque las cosas van bien, lo difícil es poder encontrar el tiempo para hacer estas cosas, pero habrá otros momentos en que no estaré tan ocupado y podré hacerlas”.
Baker se casó en 1998 con la actriz australiana Rebecca Rigg, después de vivir juntos durante cinco años. Rebecca dejó a un lado su carrera para dedicarse a él, al hogar y a sus hijos cuando se mudaron a Hollywood, para multiplicar el éxito que él tenía en Australia, lo cual rindió excelentes frutos a partir de 2008 con The Mentalist. De vez en cuando Rigg actúa; no hace mucho la vimos junto a Naomi Watts en la película Fair Game y también en un episodio de The Mentalist. Naomi es la madrina de Claude, de 14 años; Nicole Kidman es la madrina de Harry, el más pequeño, de 12. Baker cuenta que su familia lo ayuda a mantener los pies en la tierra.
¿Qué admiras más de tu mujer?
Le comentaba anoche a mi hija que lo que me resulta más interesante, lo que más admiro de ella a los 43 años es lo que más me desesperaba a los 26. Es una mujer fuerte, inteligente, apasionada, de opiniones controversiales, que dice lo que piensa?
Los Baker se mantienen unidos gracias a que Rebecca está en casa todo el tiempo, algo que él aprecia. Con frecuencia se les ve pasear, conversando animadamente, o tomar un café antes o después de llevar a caminar a su perrito Happy por Santa Mónica. En ocasiones los acompañan los chicos, ya que Stella está en la universidad, donde estudia artes liberales.
¿Qué quieres para tus hijos?
Lo más importante para mis hijos es que descubran lo que les haga felices. Que tengan confianza en sí mismos para encontrarlo, lo cual es difícil, y el coraje para lograrlo. Mi hija se siente presionada porque cree que tiene que saber lo que debe hacer. No comprendo esa obsesión de la juventud y el éxito en los Estados Unidos. No me imagino teniendo el éxito que tengo ahora cuando tenía 20 años de edad...
Los Baker: Rebecca, Simon, Stella, Claude y Harry
¿Qué precio has pagado por la fama?
En realidad no me gusta pensar en esos términos. No he dejado de hacer, pienso en las oportunidades que tengo por delante. Me gustaría viajar, explorar, hacer fotografía, pero ya haré todo eso. Ahora, cuando estoy filmando, trabajo largas horas.
¿Hasta cuándo crees que puedes continuar...
¿Siendo actor?
No..., manteniendo fresco el personaje de Patrick Jane.
Un par de temporadas más.
En la primera imagen, su más reciente incursión en el cine es la comedia I Give It a Year. A la derecha, en una escena de The Mentalist junto a Robin Tunney, en el papel de Teresa Lisbon
Dado que no filma episodios de The Mentalist entre los meses de abril a julio, aprovecha ese tiempo par a ir de vacaciones a Australia. El año pasado fue a Francia con su familia. También pudo filmar I Give It a Year, una comedia romántica británica.
Este año tenía planeado rodar un proyecto propio, para el cual tenía una idea que quería escribir. Es un lector ávido, cuyo autor preferido es Ernest Hemingway “por la calidad de la prosa”.
¿Qué estás leyendo en la actualidad?
Estoy leyendo Lost at Sea, de Jon Ronson; él escribió The Men Who Stare at Goats, que estuvo en la lista de The New York Times durante varios meses...
Sí, sí, claro. George Clooney...
En efecto, George Clooney trabajó en la película que se hizo basada en el libro. Me gusta muchísimo como escribe Ronson, porque tiene un afilado ingenio. Pero mi autor favorito es Hemingway.
Si bien el concepto de caballero ha cambiado en los últimos 20 años, ¿cuál crees que es la principal diferencia entre un hombre y un caballero?
La manera en que se comporta.
¿Por qué prefieres ser un caballero?
Prefiero ser consciente de las necesidades de los demás y tener una conexión pacífica en lugar de hostil, lo cual a veces solo exige abrir una puerta.
O el ofrecer un paraguas...
Ahí estableces una conexión.
¿Qué te agrada de Givenchy?
Que se sienten cómodos conmigo, con que yo represente la marca.
¿Cuál es tu principal responsabilidad como padre y como figura pública?
Como padre es aceptar. Como figura pública, ser honesto conmigo mismo.
En el plano personal, ¿qué te irrita?
La ignorancia de algunos y el creerse con derecho a todo. Me parece atrevido.
¿Qué te hace feliz?
Mis hijos. El poder ver, respirar y oír. También podría ser maravilloso estar muerto, pero no lo sé...
¿Qué necesitas contigo siempre?
Nada. Una buena disposición.
Y Simon Baker la tiene.