La actriz tuvo una experiencia traumática cuando subió de peso
Sharon Stone siempre ha sentido una gran preocupación por conservar su impecable apariencia física, por lo que no resulta extraño que pasara por uno de los “peores” momentos de su vida tras engordar 20 kilos cuando tenía 20 años.
“A los 20 años tuve un accidente cuando practicaba equitación y después de aquello tuve que seguir un tratamiento de cortisona. Eso me hizo engordar unos 20 kilos. Fue algo horrible, en unos días me convertí en una mujer sin apenas cintura, con pechos enormes y un trasero gigante. En ese momento me quería morir. Me convertí en una persona muy introvertida”, confesó a la revista Shape.
Después de esa vivencia, la famosa es muy estricta con su alimentación y su dieta, ya que cuando ve un cambio mínimo en su figura se pone muy mal y en ocasiones rompe en llanto.
“Recuerdo que cuando tenía 40 años me encerré en el baño con una botella de vino y me dije: ‘No voy a salir de aquí hasta que me acepte como soy’. Estuve observando mi cara y mi cuerpo durante horas, llorando sin parar. En ese momento pensé que me gustaría envejecer como una bailarina, porque siempre conservan su figura”, agregó al mismo medio.