Las actrices Salma Hayek y Penélope Cruz han vuelto a dejar patente que la estrecha amistad que forjaron hace casi dos décadas, cuando ambas eran relativamente novatas, pero igualmente prometedoras en la industria de Hollywood, no se ha desgastado lo más mínimo a pesar de la distancia que las separa, sus apretadas agendas profesionales y, sobre todo, del sinfín de responsabilidades que se desprenden de sus respectivas vidas familiares. Tanto es así, que la oscarizada intérprete no quiso desaprovechar la oportunidad de entregar personalmente a la mexicana el premio al ‘Personaje del Año’ con el que ha querido rendirle homenaje la edición española de la revista Vanity Fair: todo ello en el marco de un exclusivo evento que tuvo lugar este miércoles en el Teatro Real de Madrid. Visiblemente cansada, pero emocionada ante la “excusa perfecta” que le habían proporcionado para volver a España, Salma se mostró en todo momento sonriente y encantadora con los reporteros y el resto de invitados a la gala. Por si eso no fuera suficiente, la artista también tuvo presente en todo momento que su estancia en la ciudad de Madrid merecía hacer un emotivo repaso a la longeva trayectoria que le une a la de Alcobendas. “Acuérdate de que Penélope y yo somos socias, fuimos juntas de la mano, abriéndonos paso [en la meca del cine]. Y qué bonito que después de tantos años, que ya son muchos, podamos seguir estando juntas y con tantos logros: una carrera, una familia, el amor, y también nuestra amistad, claro. Me alegra que después de tantos años juntas, de haberla visto difícil, de haber crecido la una con la otra, podamos disfrutar de este momento de plenitud y celebrando los éxitos juntas”, declaraba Salma a su paso por la alfombra roja y en su breve encuentro con los periodistas que cubrían el acto. Por su parte, durante el discurso de introducción previo a la llegada de Salma al escenario -la cual se vio acompañada de vítores y un prolongado aplauso-, Penélope quiso dar públicamente las gracias a la homenajeada por haberla “acogido” varios días en su casa cuando tomó la decisión de probar suerte en la escena estadounidense, en la que, todo sea dicho, Salma ya gozaba de cierta popularidad con su participación en filmes como “From Dusk Till Dawn” y “Desperado”, esta última protagonizada junto a Antonio Banderas. “Recuerdo la primera vez que viajé a Estados Unidos con billete cerrado de vuelta y Salma me acogió en su casa”, explicaba la española sobre la incertidumbre que le embargaba en los inicios de su aventura californiana y el apoyo que, en ese sentido, le brindó la mujer con la que acabaría protagonizando la denostada cinta ‘Bandidas’ (2006) y con la que también pudo celebrar la primera y única nominación de Salma al premio Óscar (‘Frida’, 2003) o la estatuilla dorada que ella misma conseguiría en 2009 por ‘Vicky Cristina Barcelona’.