A principios de año, Rihanna tomó la dura decisión de emprender acciones legales contra su propio padre, Ronald Fenty, por tratar de explotar su buen nombre como empresaria en beneficio propio y sin su consentimiento. En concreto, el hombre creó junto a otro socio una empresa de representación que bautizó como Fenty Entertainment, LLC con el objetivo de que se asociara automáticamente a la cantante y a las líneas de moda y maquillaje que ella comercializa bajo unas marcas registradas utilizando su apellido en común. De esta forma, Ronald habría tratado de confundir a los promotores de conciertos y eventos similares para hacerles creer que trabajaba para la estrella del pop -cuyo verdadero nombre es Robyn Rihanna Fenty- y cerrar acuerdos por futuros conciertos de los que ella no estaba al corriente y que no llegarían a celebrarse nunca.
El pasado, pasado
Sin embargo, parece que padre e hija han sido capaces de solucionar sus diferencias y la famosa artista le habría perdonado sus errores del pasado en vista de que esta semana se les ha visto juntos en la celebración del Crop Over Festival de su Barbados natal, que festeja el final de la temporada de cosecha de la caña de azúcar y que Rihanna trata de no perderse nunca. En las imágenes que han trascendido, se les puede ver muy sonrientes y sacándose selfies mientras ella le planta un beso en la mejilla.
Lo sucedido
En los documentos legales que presentó junto a la demanda que interpuso en contra de su progenitor, la intérprete afirmaba que este no había recibido en ningún momento autoridad o permiso alguno para actuar en defensa de sus intereses y que ella le había enviado por medios de sus abogados varias cartas de advertencia para que renunciara a sus planes antes de optar por recurrir a la justicia para solventar la solución.
