Hace un par de semanas, Adele se dejó ver en la divertida fiesta por el 37 cumpleaños del rapero Skepta celebrada en Londres. Al tratarse de una de sus primeras apariciones públicas tras conocerse que en agosto había solicitado finalmente el divorcio del que fuera su pareja durante los últimos siete años, Simon Konecki, la principal incógnita era si acudiría sola o acompañada.
Según la información que publica ahora el periódico The Sun, la intérprete no llevó ninguna cita porque la persona con quien habría rehecho su vida sentimental era precisamente el protagonista de la velada.
Apoyo mutuo
Al parecer, Adele y Skepta se habrían estado apoyando mutuamente tras sus respectivas rupturas. La cantante se separó del padre de su único hijo en abril y él mantuvo un breve romance con la modelo Naomi Campbell el año pasado que concluyó rápidamente tras conocerse que se iba a convertir en padre de una niña junto a otra mujer.
Viejos conocidos
Entre los dos artistas, que se conocen al menos desde 2016 y da la casualidad de que se criaron en el mismo barrio londinense, existiría una conexión muy especial, pues ambos habían reconocido admirarse mutuamente, por lo que que no habría hecho más que fortalecerse recientemente.
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“Muchos de sus amigos están convencidos de que podrían acabar formando una pareja maravillosa algún día”, apuntó una de las fuentes a las que recurrió la mencionada publicación.
Relajada
Por el momento, el representante de Adele, que siempre se ha caracterizado por hablar de su vida privada únicamente en sus canciones de amor, se ha negado a realizar ningún comentario al respecto. Lo cierto es que en los últimos tiempos, la artista ha demostrado que quiere aprovechar su recién soltería para divertirse al acudir a diversas fiestas en Los Ángeles y dejarse ver con varios de sus amigos en distintos eventos.
