Al igual que le ha sucedido a muchos otros artistas cuando comenzaron sus carreras en solitario, el estilo musical de Camila Cabello cambió considerablemente tras su salida de Fifth Harmony debido a que ya no se veía limitada por las normas que las discográficas imponen a ese tipo de bandas y, en consecuencia, por fin era libre para evolucionar como artista.
Sus limites
A lo largo de todo ese período de exploración y descubrimiento ha habido ciertas líneas que la cantante de 22 años no se ha permitido cruzar ni en las letras de sus sencillos ni en sus videoclips, y no lo ha hecho solo por no alienar a su público adolescente -o a sus padres-, sino también porque es consciente de que su hermana pequeña Sofía, de 12, ve y escucha todo lo que hace.
“Recuerdo perfectamente lo mucho que yo admiraba a Taylor Swift [ahora amiga íntima suya] cuando tenía esa edad. La verdad es que no creo que tenga que cambiar demasiado mi manera de ser para convertirme en un buen ejemplo en el que puedan fijarse las chicas jóvenes, pero sí que lo tengo muy presente. No he utilizado palabras malsonantes en ninguna de mis canciones”, expresó Camila en su entrevista a la revista Wonderland.
En realidad, la mayor provocación que se permitió en ese sentido mientras abrazaba una imagen más adulta fue enumerar una serie de sustancias -nicotina, morfina y heroína- en el tema ‘Never Be The Same’ y lo hacía solo para describir el carácter adictivo u obsesivo de una relación ficticia.