Sin hacer referencia alguna a las críticas que le han venido dirigiendo recientemente sus dos exparejas más notorias, su exmarido Nicolás Vallejo-Nágera y el cantante Gerardo Bazúa, a cuenta de sus supuestos intentos de mantener a sus dos hijos, Nico y Eros, alejados de sus respectivos progenitores, la cantante Paulina Rubio quiso sincerarse en televisión sobre los entresijos de su papel de madre y, especialmente, acerca de la vida futura que espera para sus dos retoños.
“Yo lo que quiero es que estén en armonía, que sepan quiénes son, que estén felices, que no se caigan, lo típico”, explicó la chica dorada en conversación con el programa ‘Hoy’ del canal Televisa, para revelar a continuación otros de los objetivos que se ha marcado en lo relativo a la educación de sus hijos. “Ahora veo que a veces uno se tiene que caer para aprender por sí solo. Tampoco quiero sobreprotegerlos”.
La también ‘coach’ de las diferentes ediciones del concurso ‘La Voz’ en España, donde comparte set con David Bisbal, Antonio Orozco y Pablo López, incidió en la importancia que tiene para ella asegurarse de que Nico y Eros van adquiriendo “poco a poco” la autonomía necesaria para superar con éxito los retos que se irán encontrando por el camino, así como la empatía que tan imprescindible resulta para que sean siempre respetuosos con los demás.
Su futuro como familia
“Quiero que sean independientes, que se den y que sepan dar, los valores de la vida normal, que no sean posesivos, que no sean celosos, pero poco a poco, ¿no? Tampoco uno tiene un manual de ser mamá”, añadió en su conversación con la presentadora y actriz Galilea Montijo.
En lo que a ella misma se refiere, Paulina espera poder contar también con la “armonía, la paz, el tiempo y los proyectos” que tanto requiere para sentirse realizada a todos los niveles: unos deseos -sobre todo los dos primeros- que contrastan radicalmente con la tensa relación que le une actualmente a los dos progenitores de sus hijos.
Problemas legales
Hace unas semanas Colate denunciaba que la artista había emprendido medidas legales contra él por haber incumplido supuestamente -lo cual él negaba con rotundidad- los términos del calendario fijado para que Nico pueda disfrutar de sus dos progenitores, poco después Gerardo acusaba precisamente a Paulina de ignorarle constantemente para conseguir, a su juicio, que Eros acabara olvidándose de sus raíces.
“Ni fotos, ni llamadas, ni visitas, nada absolutamente nada... Además, dejas al bebé con quien tú quieres... Por otra parte tú no permites que mi hijo conviva con sus hermanos, primos, tíos y abuelos acá en México y lógicamente lo haces para que el bebé esté alejado de sus raíces y así no conozca de donde viene y quienes son su familia paterna”, le dirigía a través de las redes sociales, el único medio del que disponía Gerardo, según su versión de los hechos, para ponerse en contacto con ella.
