Este domingo, Maroon 5 amenizará el intermedio del Super Bowl con ayuda de los raperos Travis Scott y Big Boi tras un largo y tortuoso proceso hasta confirmarse su presencia en la cita. Por norma general, los artistas consideran un honor -y una plataforma de promoción incomparable- la posibilidad de tocar en el evento deportivo más importante del año en Estados Unidos, pero la edición de este año se ha visto ensombrecida por la polémica en torno al trato que la NFL había dispensado a los jugadores que se arrodillaron mientras sonaba el himno estadounidense antes de los partidos como señal de protesta ante la brutalidad policial contra la comunidad negra, llegando a prohibir expresamente que lo hicieran y amenazando con sanciones a los equipos de los deportistas que desacataran sus órdenes. En medio de esa controversia, aceptar la oferta para ponerse al frente del espectáculo podía colocar a la banda liderada por Adam Levine en terreno delicado, ya que ciertos sectores de la sociedad y del mundo del espectáculo les reclamaban a sus compañeros y a él que se negaran a actuar en el mediático descanso para mostrar su solidaridad con deportistas como el quarterback ya retirado Colin Kaepernick, quien acabó viéndose apartado de la competición por la manera en que eligió defender sus ideales. La solución que han encontrado a ese dilema ha sido seguir adelante con sus planes de tocar en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, Georgia, pero a cambio de que tanto la NFL como su discográfica Interscope realicen una donación conjunta de 500 mil dólares a la organización benéfica ‘Big Brothers Big Sisters of America’, que ayuda a niños y niñas en riesgo de exclusión social a través de mentores que les ofrecen guía y apoyo de manera individual. Esa es la misma fórmula que empleó Travis Scott a la hora de confirmar su participación en el evento, asegurando que él apoyaba el derecho de cada persona a defender sus creencias y por eso había puesto como condición que la Liga Nacional de Fútbol Americano se le uniera a la hora de realizar otra generosa donación, en esa ocasión a la organización Dream Corps.