La semana pasada, Mandy Moore participó en un artículo del periódico The New York Times centrado en los abusos y atropellos que su exmarido Ryan Adams habría cometido desde su posición de poder en la industria discográfica, en especial entre jóvenes artistas, para relatar cómo él la había menospreciado constantemente a nivel musical y le había impedido establecer contactos vitales en el sector que le ayudaran a expandir su carrera más allá de su estatus de antigua estrella juvenil.
Ahora, la protagonista de la serie This Is Us ha ahondado en esa dinámica poco saludable y que ella misma ha descrito como rayana en el abuso psicológico en una nueva entrevista en la que asegura que a ella le tocó convertirse en el pilar de apoyo y, básicamente, en la cuidadora a tiempo completo del famoso cantautor a pesar de que era una década menor que él.
“Aceptaba muy pocas ofertas, aunque nunca paré por completo. Pero saltaba a la vista que cada vez que me ausentaba por motivos laborales, todo se venía abajo en casa. No era capaz de hacer un trabajo en condiciones porque al mismo tiempo tenía que dedicar una atención constante a esa otra persona, que me necesitaba y no me permitía hacer ninguna otra cosa”, recuerda acerca de su dinámica doméstica.
En el momento en que se conocieron, Mandy tenía 23 años y unos meses antes había atravesado un duro bache emocional cuando su madre anunció que iba a separarse de su padre para iniciar una nueva vida con otra mujer. Ella misma reconoce que ese trauma acabó siendo un factor de peso en su decisión de casarse tan joven con Adams en 2009, en un intento por controlar lo que ocurría a su alrededor y formar su propia familia. La situación en que se acabó encontrando fue, sin embargo, justo la contraria: en los siguientes meses su propia vida personal fue reduciéndose más y más y pasó a supeditar su propia autoestima al bienestar de su entonces pareja.
“Estaba viviendo mi vida por y para él... era como su madre. Era una dinámica completamente enfermiza. Yo no tenía ninguna identidad propia... me sentía muy poca cosa. Estaba ahogándome. Era una situación insostenible, imposible de justificar, y me sentía muy sola y muy triste. Era como si a su lado estuviera en realidad sola. Sabía que él no era la persona con la que debía estar”, ha confesado a su paso como invitada al podcast WTF de Marc Maron.
Incluso, después de su separación en 2015, ambos continuaron manteniendo conversaciones en bucle durante meses, según afirma Mandy, y tuvo que pasar todavía más tiempo antes de que ella pudiera romper con todo ese drama y pasar página.