El pleito legal por la custodia del joven parece llegar a su fin
Después de que el joven Rocco, hijo de Madonna y el cineasta Guy Ritchie, acaparara todo tipo de titulares en diciembre al decidir que se quedaba en Londres con su padre y que no regresaría a Nueva York -desafiando así tanto a su famosa madre como al juez encargado de resolver la disputa generada en torno a su custodia-, las aguas parecen haber vuelto finalmente a su cauce ahora que la estrella del pop y su segundo hijo se han dejado ver en la Gran Manzana en una situación de aparente normalidad.
Como publica la revista People, Rocco apareció el martes por la mañana en el centro de Manhattan junto a unos amigos con los que salió a tomar café horas antes de dirigirse a la propiedad que Madonna tiene en el Upper East Side. Ya durante la noche, la cantante, su primogénita Lola y el propio Rocco confirmaron ante las cámaras que les esperaban a la entrada de un teatro de Broadway que la familia vuelve a estar unida.
Tan mediático acercamiento, según la publicación, podría indicar que la batalla legal que todavía enfrenta a Madonna y a Guy Ritchie estaría cerca de llegar a su fin.
De hecho, la intérprete y el director británico deberían haberse presentado hoy miércoles en la Corte Suprema de Nueva York para asistir a una vista oral sobre el reparto de responsabilidades de cara a su hijo, pero la sesión se habría aplazado para concederles más tiempo ante la posibilidad de que ambos lleguen a un acuerdo extrajudicial.
Hace solo unos meses, Madonna se presentó en Londres con la intención de resolver tanto los desencuentros que mantenía con Rocco, de quien se ha especulado que estaba cansado del tipo de vida nómada que llevaba su madre por culpa de sus giras musicales, como el litigio que aún mantiene con su exmarido. Sin embargo, los resultados de ese primer intento de reconciliación nunca salieron a la luz.
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