La oscarizada Sandra Bullock no tiene problemas en obviar -ya sea inconsciente o deliberadamente- esa secuela del clásico de acción Speed que protagonizó en el año 1997 junto a Jason Patric para tratar, sin éxito, de repetir el fenómeno de taquilla en que se convirtió la cinta original que, tres años antes, la llevó a formar pareja cinematográfica con el cotizado Keanu Reeves.
La opinión de Sandra
Y es que, preguntada por la posibilidad de que su antiguo compañero y ella retomen algún día sus afamados personajes para dar continuidad a la historia de ese autobús que debía estar en constante movimiento para evitar la activación de una bomba alojada en su interior, la intérprete decidió compartir directamente su teoría sobre el tipo de ‘segunda parte’ que merecería el público.
“No estaría mal hacer otra película, pero cuando tengamos 67 o 69 años. Seríamos una pareja de ancianitos en uno de esos autobuses que vienen con una plataforma para ayudar a la gente mayor: un matrimonio de viejecitos, con nuestros andadores, tratando de llegar a la residencia donde vivimos antes del toque de queda”, bromeó en conversación con el portal de noticias ‘Entertainment Tonight’.
¡Flores para Keanu!
Por otro lado, Sandra quiso restar importancia a esos comentarios que hacía recientemente Keanu sobre las dificultades que atraviesa a día de hoy el intérprete a la hora de encontrar pareja, hasta el punto de asegurar que el atractivo físico y personal de su amigo es más que suficiente para encandilar a cualquier chica que se le ponga por delante.
“Creo que no necesita ayuda de nadie, ¡y menos aún la mía! Sigue estando tan estupendo como siempre”, señaló la intérprete en la misma entrevista.