El paso del tiempo y el período festivo consiguieron que la calma vuelva a reinar en uno de los matrimonios más sólidos de la meca del cine, el formado por Justin Timberlake y Jessica Biel, después de que él fuese fotografiado en diciembre dándole la mano a otra mujer e intercambiando gestos de complicidad durante una noche de fiesta.
Este fin de semana, la famosa actriz viajó hasta Nueva York con su hijo de cuatro años para visitar a su marido, que se encontraba en la ciudad desde hacía unos días. Allí se dejaron ver paseando del brazo por la calle mientras desafiaban las bajas temperaturas invernales.
Aunque se trata de su segunda aparición en público desde el escándalo que causaron las imágenes del cantante con Alisha Wainwright, su compañera de reparto en su nueva película Palmer, ya que hace unas semanas Jessica y él acudieron a cenar juntos a un restaurante de Los Ángeles, sí es la primera en que se han mostrado tan sonrientes. En su momento, el antiguo ídolo pop fue el único de los dos que salió al paso de los rumores acerca de su supuesta infidelidad vía Instagram para aclarar que no había sucedido nada entre Alisha y él y reconocer que había hecho gala de una “falta de criterio imperdonable”.
Jessica prefirió dejar que su marido lidiara solo con las consecuencias de una velada en la que él mismo admitió que había “bebido demasiado” y se disculpara por haber colocado a toda su familia en una situación tan vergonzosa.