Rendimos honor a este genio de la actuación recordando algunas frases de sus personajes que nos conmovieron profundamente.
Robin Williams, un genio de la actuación, nos dejó el 11 e agosto de 2014; sin embargo, su recuerdo prevalecerá en su obra, en los múltiples personajes que interpretó y que nos hicieron reír o llorar, pero nunca nos dejaron indiferentes. Desmedido, cómico, histriónico... son algunas de las palabras que se han usado para describir a este hombre que llevaba en sus venas el poderoso llamado de la interpretación, para él, imposible de acallar. Varias de sus películas son memorables para la historia del cine, de ellas, hemos seleccionado algunas frases inolvidables de sus personajes, con las que queremos rendir homenaje al fallecido actor. “Oh Capitán, mi Capitán”, hasta siempre.
Frases inolvidables en las películas de Robin Williams
Dead Poets Society (1989)
Personaje: John Keating - “No importa lo que los demás te digan, las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo”. - “Siempre he pensado que el objetivo de la educación es aprender a pensar por sí mismo”.
- “Hay un tiempo para la audacia y un tiempo para la cautela, y un hombre sabio entiende cuál es la que se necesita”.
Mrs. Doubtfire (1993)
Personaje: Mrs. Doubtfire - “Dicen que la clave para un matrimonio sólido es la risa”.
The Birdcage (1996)
Personaje: Armand - “Sí, yo uso maquillaje, Sí, vivo con un hombre. Sí, soy un homosexual de mediana edad. Pero yo sé lo que soy. Me tomó veinte años llegar hasta aquí y no voy a permitir que cualquier senador idiota destruya eso”.
Good Will Hunting (1997)
Personaje: Sean - “Una pérdida real solo es posible cuando amas algo más que a ti mismo”.
What Dreams May Come (1998)
Personaje: Chris Nielsen - “Lo que es realidad en nuestra mente es cierto, aunque algunas personas lo sepan o no”. - “Lo que algunos llaman imposible, son solo cosas que no han visto antes”. - “No se trata de entender... Se trata de no renunciar”.
Patch Adams (1998)
Personaje: Patch Adams - “Si tratas una enfermedad, puedes ganar o perder. Si tratas una persona, te garantizo que vas a ganar, no importa cuál sea el resultado”. - “Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni dónde. Sin rodeos, sin problemas y sin orgullo. Te amo porque no conozco otra manera más que esta. Tan cerca, que tu mando sobre mi pecho, es mi mano. Tan cerca, que cuando cierras los ojos, yo me duermo”. - "¿Qué hay de malo en la muerte? ¿Por qué estamos tan mortalmente asustados de
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