Parece que Joe Jonas y Sophie Turner no van a poder disfrutar de un momento de tranquilidad ni siquiera en su luna de miel... De cara a su segundo enlace de este fin de semana en Francia, la pareja consiguió que no se filtrara ninguna imagen del interior de la ceremonia gracias, en gran parte, a su sabia decisión de requisar el teléfono móvil de DJ Diplo, que había sido el responsable de transmitir vía Instagram su boda de Las Vegas, y de pedir al resto de invitados que limitaran el uso de las redes sociales.
La culpable
Su intención era tomarse unos días de descanso en la más estricta intimidad tras renovar sus votos, pero ese plan se ha ido al traste por culpa de la indiscreción de otra recién casada: la actriz y cantante Katharine McPhee, que contrajo matrimonio en Londres con el productor David Foster el pasado sábado. Harta de la presencia constante de los fotógrafos durante su escapada a Italia, Katharine decidió informarles de que el cantante y la intérprete se encuentran atracados a unos escasos metros de distancia de su propio barco, probablemente con la esperanza de que así dejen de merodear alrededor de las demás embarcaciones mientras tratan de localizarles. “A la jauría de paparazzi que me está acosando mientras me encuentro en medio del océano en Europa: Joe y Sophie están dos yates más abajo. Céntrense en lo que realmente importa”,anunció vía Twitter. https://twitter.com/katharinemcphee/status/1146121267956703232 Curiosamente, la actriz de Game of Thrones no tardó en responderle con un tuit que podría interpretarse de dos maneras: como una broma que demostraba que no le guardaba ningún resentimiento, o como una venganza en toda regla al revelar el próximo destino en el viaje de Katharine y David. "¡Me muero de ganas de viajar juntos a Cabo mañana! Nos vemos en el aeropuerto”, le aseguró Sophie. https://twitter.com/SophieT/status/1146342787685572610 ¿Será todo parte de un juego entre las actrices para despistar a los paparazzi?