La joven intérprete de ?Un camino hacia el destino? conversa en exclusiva con VANIDADES sobre la música, sus gustos y el futuro
A los 25 años, Paulina Goto está viviendo una etapa enriquecedora, que no solo la beneficia como actriz, sino que amplía su campo profesional. Desde pequeña, mientras su padre tocaba la guitarra y ella cantaba, también quería actuar. Esos deseos se consolidaron cuando después de participar en programas juveniles en Tampico, hizo dos castings y a los 17 fue seleccionada para el Centro de Educación Artística de Televisa, en la Ciudad de México. ?Era lo que quería hacer desde chica?. Para perfeccionarse como actriz se instaló en el D.F., lejos de su hogar. Eso sí, trata de ver a sus familiares al menos una vez al mes. En Navidad viajó a Monterrey para compartir con ellos y les habla por teléfono frecuentemente.
A principios de 2016, Paulina regresó a Villa Victoria en el Estado de México. Este lugar ?una hacienda a hora y media del D.F.? se mantuvo en secreto durante mucho tiempo para continuar las grabaciones de Un camino hacia el destino, una producción de Nathalie Lartilleux para Televisa. Allí conversamos con esta simpática y amable actriz, que comunica entusiasmo y joie de vivre, a la vez que convicción y tenacidad en su trabajo.
Mirando hacia atrás, en el 2010 Paulina debutó en el universo de las telenovelas. Primero colaboró con Pedro Damián en Niña de mi corazón y volvió a trabajar con él en Miss XV, en el 2012. En el 2014 interpretó a Fanny Lascuráin en Mi corazón es tuyo, lo que le representó varios reconocimientos. Antes de que le ofrecieran el papel de Luisa Fernanda, ?leí y quedé encantada con el guion de Un camino hacia el destino?. Cuando le propusieron protagonizar a la joven heroína, ?me emocioné mucho?. Ahora encarna a alguien muy diferente al divertido e imprudente personaje de Mi corazón es tuyo. También incorporó a su vida un riguroso plan de clases de violín, la gran pasión de Luisa Fernanda, quien encuentra en la música la manera de darle sentido a su conflictiva realidad.
¿Cómo te preparas para interpretar a una chica cuya realidad es muy distinta a la que había conocido mientras crecía y que había experimentado durante 18 años?
El personaje es un reto para mí, pero desde el año nuevo me dije que este era un año de retos. No solo eso, sino que Luisa Fernanda toca el violín, algo de lo que yo no tenía ningún conocimiento. El personaje y el instrumento han sido desafíos para mí. Por supuesto que me apoyo mucho en mis directores; comenzamos desde antes con talleres y con clases de violín. La música es una pasión que Paulina comparte con Luisa Fernanda. La actriz confiesa: ?Amo la música?.
¿Qué tipo de música prefieres?
Crecí en el norte, por eso me gusta la banda. También me encantan el rock, el pop... y el tango.
¿Ha cambiado tu relación con la música después de la experiencia de la telenovela?
Sí, ahora la amo más.
No es de extrañar que con el transcurso de las semanas haya descubierto que al tomar clases de violín para interpretar algunas escenas, ?fue como si estuviera dentro de una burbuja en la estoy conectada al instrumento de una forma especial?.
En medio del rigor de las grabaciones, ¿qué haces para relajarte?
Me gusta meditar y hago yoga. Para actuar hay que estar relajada.
¿Qué proyectos tienes para el resto de este año?
Además de la continuar con las grabaciones de la novela planeo el lanzamiento de mi primer álbum.
Como anticipo la escuchamos cantando el tema de apertura de la novela: una balada de Lalo Murgía. Paulina se ve actuando en cinco años y ?quién sabe si quizás hasta pueda estar casada. Tener una pareja sería algo muy lindo?, comenta risueña.
¿Qué es el amor para ti?
Lo más importante de la vida, lo que me mueve cada día. Cuento con el amor y el apoyo de mi familia.
¿Qué te hace reír, llorar, ser feliz?
Mi hermano me hace reír, pues es muy chistoso. Soy muy sensible, por lo que ver a alguien que esté mal y estar lejos de mi familia me hacen llorar. Mi trabajo me hace feliz.
