El exfutbolista, icono publicitario y diseñador puntual David Beckham siempre ha sido consciente de la importancia que tiene para una figura de su categoría mantener su piel radiante y luminosa, especialmente cuando su ajetreada vida le obliga a viajar constantemente por el mundo y visitar ciudades con condiciones climatológicas y de humedad radicalmente diferentes. Sin embargo, antes de que empezara a familiarizarse con los numerosos cosméticos que, en este sentido, se encuentran ya a disposición de los varones más coquetos y detallistas, el exjugador del Real Madrid solía “robar” directamente los productos que a tal efecto tenía su esposa Victoria en el tocador, por lo que hay que acreditar una vez más a la diseñadora como la persona que se encargó de convertir al exdeportista en un tipo aún más sofisticado si cabe. “Mi primera aproximación al mundo del cuidado masculino se produjo cuando comencé a robarle a mi mujer sus cremas, así empezó todo, sinceramente. Siempre tuve claro cómo quería tener mi pelo y otras muchas cosas, pero hasta entonces no le había prestado tanta atención al tema de la piel”, explicó el siempre atractivo británico a la revista Gloss. “Claro que mi carrera también me llevaba a pasar mucho tiempo al aire libre, ya estuviera en Mánchester, Madrid, Los Ángeles... Todas esas ciudades que son tan diferentes en lo que al tiempo se refiere. Supe enseguida que tenía que cuidar mucho la piel y en ese momento no conocía productos específicos para hombres. Robaba los de mi esposa porque sé que ella tendría siempre lo mejor”, añadió en la misma entrevista. Desde luego, los tiempos han cambiado mucho en este aspecto y, por supuesto, también el papel que la moda y la cosmética juegan ahora en el día a día del astro del balón, quien desde su retirada ha lanzado varias colecciones de ropa interior con su firma y, junto a la firma L’Oreal’, una línea de productos para el cuidado de la piel masculina llamada ‘House 99'. “Aparte de las cremas de mi esposa, en esa época ni utilizaba limpiador facial ni tampoco creía tener tiempo para hacerlo. Ahora tengo mi limpiador facial, mi exfoliante, mi mascarilla y cualquier otro producto que considere imprescindible”, aseveró.