¿Estás pensando en desaparecer pequeñas patitas de gallo? ¿Te preguntas si puedes usar bótox y otros rellenos aun si eres joven? Consultamos a la doctora Karen Carrillo, esteticista de varias celebridades para resolver todas tus dudas.
“Cuando pensamos en cirugías plásticas y rellenos, lo primero que viene a la mente es “no envejecer”, la medicina estética es más amable y, sobre todo, preventiva, “los rellenos no son para cuando ya no hay nada que hacer, sino para que no se caiga la piel drásticamente”, dice la doctora Karen Carrillo, médico general especializada en medicina estética.
¿A qué edad es recomendable empezar a usar rellenos?
No hay una edad específica, pero alrededor de los 25 años, algunas personas ya presentan bolsitas y ojeras o, inclusive, patitas de gallo. Al paso del tiempo pierdes resistencia en la piel y se pueden aplicar pocas unidades de relleno para prevenir. Si a los 35 comienza a los 50 tendrás la piel lisa y conservarás tu expresión en el rostro; pero si te esperas a tener la piel colgada y las arrugas marcadas necesitarás una intervención quirúrgica, que será algo largo y con recuperación lenta. Yo uso rellenos desde los 26 años y tengo 37, soy el mejor ejemplo.
¿Qué zonas son las que envejecen primero?
Los ojos: las líneas de expresión, las bolsas, los párpados caídos y la pérdida de volumen de las mejillas; el entrecejo, las manos y el cuello. A veces es recomendable hacerse un tratamiento integral para cara, cuello y manos.
¿En cuanto a los ojos “cansados”, cuándo se es candidata a una cirugía plástica y cuándo no?
Es importante aclarar que una cosa son las bolsas y otras las ojeras; hay pacientes muy jóvenes con bolsas grandes, que no es lo mismo que el paciente con ojo hundido, producto de la vista cansada o la edad, o bien la típica ojera oscura por no dormir. Si tienes bolsitas y ojo hendido eres candidato a relleno; pero si tienes bolsas grandes, lo recomendable es cirugía plástica, se llama “blefaroplastia” y es la única manera corregirlas.
Hay un mito de que las bolsas de grasa vuelven a salir y no es necesario operarlas… ¿Qué opinas?
No. Sí vale la pena operarse la bolsa con un cirujano certificado porque con el tiempo aumentan. Cuando te aplicas tratamientos mínimamente invasivos como, las sesiones de enzimas, que desbaratan la grasita de la bolsa, funcionarán por un periodo corto, pero si son grandes lo recomendable es operar. Mi obligación es ofrecerle al paciente las mejores alternativas aunque no implique hacerlas conmigo.
También hay oftalmólogos que ofrecen desbaratarlas, ¿está bien eso?
Son los oftalmólogos oculoplásticos y pueden hacerlo, pero considero que es un tema que debe dejarse al cirujano plástico que estudió medicina general y siete años de especialidad de medicina reconstructiva. Lo mismo pasa con los otorrinos: si tienes un tabique desviado, roto o no puedes respirar, debes operarte con él, pero no debe encargarse de la parte estética de la misma forma en la que un cirujano plástico no debe “repararte” la sinusitis al hacer rinoplastia… Cada quién su trabajo, las especialidades deben ser aliadas.
¿Cuál es la diferencia entre un relleno de el bótox y el ácido hialurónico?
La toxina botulínica (Bótox es la marca más popular) es para rellenar arrugas y líneas de expresión antes de que se conviertan en arrugas; las más notorias son el entrecejo, las líneas de la frente y las patas de gallo. El ácido hialurónico aporta volumen, es decir, “levanta” la piel que va cayendo por edad y que provocan los surcos nasogenianos (el marco de la boca que baja de la nariz) y las consecuentes “bolsitas” junto a los labios y la papada.
¿Son sustancias seguras?
Por supuesto, tienen todos los permisos globales. Es importante decir que la toxina botulínica fue creada para disminuir migrañas y recuperar a los pacientes de las secuelas de parálisis facial, ese era su fin médico y como efecto secundario resultó rejuvenecedor; por eso se empezó a comercializar para fines estéticos. El ácido hialurónico, por su parte, proviene de la célula natural de nuestra piel que se llama fibroblasto y genera la elastina, cuando esta se reduce por la edad, nosotros lo inyectamos y la piel lo “reconoce” como propio. En conjunto, ambas aportan lozanía, frescura y un perfil muy definido a la cara.
¿Cada cuándo se debe usar un relleno?
Depende del paciente: su edad, piel, información genética y estilo de vida; pero en promedio si se aplica cada 6 o 8 meses con las unidades correctas y respetas, el tratamiento tendrás una cara natural y con volumen. Lo importante es el cuidado posterior: beber agua, dormir bien, no bañarte con agua muy caliente o meterte al sauna y no abusar del ejercicio, porque este hace que dure menos el producto. Sobre todo pedimos que no fumes, ese es el peor enemigo del relleno facial.
¿El abuso de “bótox” te quita la expresión y te puede dañar las terminaciones nerviosas, como a Nicole Kidman o Meg Ryan?
No es así, quizás en los tiempos de la salida de la toxina botulínica hace 20 años es posible que celebridades como ellas hayan abusado de un producto poco estudiado; hoy no es así. Hay muchas marcas de buena categoría, en Medicina Antiedad usamos Prelane, que es una de las mejores de la industria.
¿Qué debemos tomar en cuenta si queremos ponernos rellenos?
Lo primero y lo más importante: ¿con quién vas a ir, qué marcas usa, te muestra la caja sellada antes de inyectar, no caduca pronto, es demasiado barata? Hay consultorios que rellenan de agua los productos o que no los compran de calidad. Ve con alguien que te recomienden, googléalo y no tengas reparo en pedirle su currículum y experiencia de pies a cabeza. Un médico esteticista y cirujano plástico de valor nunca se va a ofender por eso, al contrario.
¿Te puedes aplicar sola los rellenos?
De ninguna manera. Debes ir con un profesional de la medicina estética o plástica siempre. No escatimes en tu salud, nunca.
¿Qué es lo que más te piden las pacientes?
Perfilado de rostro y pómulos. En Baja California y la zona fronteriza hay una cultura muy arraigada hacia la belleza, pero en la Ciudad de México son más conservadoras y piden verse muy naturales. Si no te gustan tus mejillas rechonchitas podemos perfilarlas con rellenos para una forma de “prisma” en la cara *(esta idea viene de la “proporción áurea”, una definición de la estructura arquitectónica que en la Antigua Grecia se aplica a todo, incluso a la belleza).
¿Qué otros tratamientos recomiendas para favorecer a la piel?
Desde jovencitas hay que prevenir con faciales; por ejemplo, un hidrofacial cada 28 días es buenísimo y siempre usar sueros o cremas antiedad para tu tipo de cutis y de acuerdo a tu edad, o sea, no te pongas cremas de señora de 60 si tienes 30, y así progresivamente. Bebe dos litros de agua y, si usas rellenos, tres litros. Duerme bien y come alimentos orgánicos –frutas y verduras; evita los procesados–. ¡Y no te estreses! El estrés también envejece.
¿Qué le dices a las mujeres que temen al envejecimiento?
Que seamos conscientes de que no podemos ir contra el tiempo, por eso hay que prevenir para envejecer con gracia, de acuerdo a nuestra edad, pero siempre sabiendo que el paso de la vida es sabiduría.