El “Strawberry makeup” es la nueva tendencia de belleza que está arrasando en redes sociales y cautivando a las amantes del maquillaje. Inspirado en el color natural y fresco de las fresas, este look busca lograr un rostro juvenil y luminoso, con especial enfoque en unas mejillas rosadas y jugosas que simulan el rubor natural que tenemos cuando estamos saludables o después de una caminata bajo el sol.
Si quieres sumarte a esta tendencia y lucir unas mejillas perfectas, sigue leyendo para descubrir cómo lograrlo paso a paso.
¿Qué es el ‘Strawberry makeup’?
El “Strawberry makeup” es un look que emula la frescura y el rubor natural, destacando principalmente las mejillas con tonos rosados y brillantes. La inspiración viene del tono rojo-rosado de las fresas maduras, que da ese toque natural y saludable a la piel. Aunque el foco está en las mejillas, este maquillaje también resalta los labios con un acabado jugoso y los ojos con un toque suave, para lograr un look juvenil y fresco.
Este maquillaje es perfecto para quienes buscan un estilo natural y vibrante, ideal tanto para el día a día como para eventos más informales. Además, es una tendencia versátil que favorece a todas las edades y tipos de piel.
1. Prepara tu piel para un acabado radiante. La base para cualquier maquillaje impecable es una buena preparación de la piel. Para conseguir ese aspecto jugoso y luminoso del “Strawberry makeup”, es importante que tu piel esté bien hidratada. Aplica una crema hidratante ligera o un primer luminoso que ayude a suavizar la piel y darle un brillo natural.
Si tu piel tiende a ser grasa, elige productos hidratantes libres de aceites y, si tienes piel seca, opta por fórmulas ricas en nutrientes para evitar que el maquillaje se vea cuarteado.
2. Aplica una base ligera y natural. Uno de los secretos del “Strawberry makeup” es que la piel luzca lo más natural posible, por lo que lo ideal es optar por una base ligera o una BB cream. El objetivo es unificar el tono de la piel sin cubrir su luminosidad natural. Si tienes pecas o zonas con enrojecimiento leve, no intentes ocultarlas por completo, ya que esto le dará autenticidad al look.
Recuerda que este maquillaje busca resaltar la frescura, por lo que es mejor evitar acabados mate o demasiado cubrientes. Aplica la base con una brocha o esponja, difuminando bien para que se vea lo más ligera y natural posible.
3. El rubor, la estrella del look. El protagonista del “Strawberry makeup” es, sin duda, el rubor rosado. Para lograr ese efecto de mejillas sonrojadas, opta por rubores en crema o líquidos, ya que estos se funden mejor con la piel, proporcionando un acabado más natural y luminoso. Aplica el rubor en las manzanas de las mejillas y extiéndelo ligeramente hacia arriba en dirección a las sienes, imitando el sonrojo natural.
Un truco para un acabado aún más fresco es aplicar un toque de rubor en la nariz, justo en el puente. Esto dará la ilusión de que tu piel ha sido besada por el sol, un elemento clave del “Strawberry makeup”.
4. Acentúa tus labios con un toque de jugosidad. Aunque las mejillas son el centro de atención, los labios también juegan un papel importante en este look. Opta por un labial rosado o un tinte de labios con acabado brillante o satinado. Los tonos suaves como el rosa fresa, el coral o los nudes rosados son perfectos para complementar el maquillaje de las mejillas.
Para darle un toque extra de volumen y frescura a tus labios, añade un poco de brillo en el centro del labio inferior. Esto creará un efecto jugoso y llamativo que complementará a la perfección el rubor de las mejillas.
5. Ojos suaves para un equilibrio perfecto. El maquillaje de ojos en el “Strawberry makeup” debe ser sutil y delicado para mantener la frescura del look. Puedes usar una sombra en tonos nude o rosados suaves para dar un toque de color a tus párpados, sin que opaquen el protagonismo de las mejillas. Añade una ligera capa de máscara de pestañas para abrir la mirada sin sobrecargarla.
Si quieres un toque más juguetón, puedes delinear ligeramente tus ojos con un delineador marrón o un tono similar a tu piel, creando un efecto suave y natural.
6. Finaliza con un toque de iluminador. Para ese brillo saludable y natural, aplica un iluminador en crema o en polvo sobre los puntos altos del rostro: los pómulos, el arco de la ceja, el puente de la nariz y el arco de Cupido. El iluminador debe ser sutil, lo suficiente para darle a tu piel ese efecto “glow” pero sin que se vea artificial. Elige un tono champán o dorado claro para mantener la armonía con el rubor rosado.
