Sephora Kids y el negocio en auge de la belleza para preadolescentes
Las redes sociales han popularizado un nuevo término: ‘Sephora Kids’. Se trata de un movimiento en el que niñas y preadolescentes muestran en TikTok e Instagram sus rutinas de cuidado de la piel y compras en tiendas de belleza como Sephora y Ulta Beauty. Sin embargo, esta tendencia ha generado un gran debate sobre si estos productos son adecuados para su edad y los efectos que pueden tener en su piel y salud mental.
Productos para adultos en pieles jóvenes
Los expertos han advertido que muchos de los productos utilizados por estas niñas están formulados para pieles maduras. Ingredientes como el retinol, ácidos exfoliantes y sueros anti-envejecimiento pueden ser demasiado agresivos para la piel joven, causando irritaciones o incluso problemas dermatológicos como el acné cosmético.
Dermatólogos especialistas señalan que la piel infantil es más sensible y que el uso de estos productos puede alterar su barrera cutánea natural, provocando eccemas o dermatitis.
El auge de esta tendencia no sería posible sin el papel de las redes sociales. TikTok e Instagram están repletos de videos con niñas mostrando sus compras y rutinas de belleza. Aunque TikTok tiene restricciones para menores de 13 años, las políticas de las redes sociales no siempre logran frenar la presencia de estos contenidos.
Algoritmos avanzados facilitan que las preadolescentes descubran cada vez más sobre el mundo del skincare y maquillaje, generando un deseo creciente de imitar lo que ven en internet.
Un negocio en crecimiento
Las marcas de belleza han sabido aprovechar esta tendencia. Empresas como E.L.F Cosmetics han visto un aumento significativo en sus ventas gracias a su estrategia de marketing enfocada en este grupo demográfico. Otras marcas emergentes, como Bubble y Gryt, han lanzado líneas de productos diseñadas específicamente para preadolescentes, lo que demuestra el potencial económico de este mercado.
Según datos de Statista, se espera que el mercado del cuidado de la piel para niños y bebés crezca a una tasa anual del 7.71%, alcanzando los 380 millones de dólares en 2028.
Consecuencias psicológicas
Más allá de los problemas dermatológicos, los psicólogos advierten sobre el impacto de esta tendencia en la autoestima de las niñas. La psicóloga Marina Romero explica que exponer a los menores a estándares de belleza irreales puede generar inseguridades y problemas de autoimagen desde edades muy tempranas.
Laura Bernal y Lucía Márquez, especialistas en salud mental infantil, señalan que el énfasis en la apariencia física puede influir en la identidad de los niños y derivar en trastornos relacionados con la alimentación o la autoestima. La clave, según ellas, está en fomentar una visión saludable de la belleza y la aceptación personal.