“¿Has notado que ese tono de rubor que se le ve espectacular a tu amiga, cuando lo usas, ¿no te resulta tan favorecedor?”, pregunta Marco Sándor ⎻maquillista profesional⎻,y explica: “Probablemente es porque tienen colorimetrías distintas. El saber con exactitud los colores que te quedan, te da mayor seguridad y confianza al salir de casa; tener la certeza de que tu imagen es la correcta, elevará hasta tu actitud”.
Se trata de un teoría básica de color que deberíamos dominar antes de decidir aplicar cualquier pigmento sobre la piel. Pero, como nunca es tarde para aprender, es momento de identificar las nociones básicas.
Para eso conversamos con un experto en maquillaje y peinado, quien comenta: “la colorimetría es básicamente el estudio a profundidad del color, se basa en analizar su percepción y estandarización, usando como base los tintes primarios (rojo, azul, amarillo), los secundarios (morado, verde y anaranjado) y los neutros”. Así, podrás saber identificar cuáles, naturalmente, resaltan tu belleza.
La importancia de los colores
No todos los colores tienen por base lo mismo, por su composición, se dividen en:
- Cálidos: Contienen amarillo, y comunican sensaciones de fuerza, alegría y movimiento.
- Fríos: Tienen base azul, y exprensan conceptos de serenidad, pasividad, amplitud y lejanía.
- Neutros: Ayudan como transición y para suavizar el look, como el marrón, beige y piel.
- Acromáticos: Son el negro, blanco y gris, y sirven para acentuar los demás tonos.
Cómo descubrir tu paleta de maquillaje
Los tonos de piel también pueden ser fríos o cálidos. La compañía Clairol recomienda las pruebas siguientes:
- Test del rubor: Ponte un blush rosa en una mejilla y uno melocotón en la otra. Mírate frente al espejo. Si el rosado te sienta bien, eres fría; si no, eres cálida.
- En las venas: Voltea tu muñeca y aprecia el color de tus venas. Si son azules, eres de un subtono frío; si son verdes, cálido. Si son verdiazul, probablemente eres neutral.
- Mente en blanco: Coloca una sábana blanca junto a tu cara y por atención. Si tu dermis se ve con notas azuladas o rosas, probablemente eres fría; pero si se ve amarillenta o naranja, es cálida.
“Sin embargo, también hay subtonos ⎻como oliváceos, rosados, naranjas, grisáceos⎻ por lo que, para obtener un diagnóstico preciso, lo más recomendable es hacerte un Análisis de colorimetría a domicilio”, sugiere el experto de Glitzi.
Consejos prácticos
Ahora que sabes cómo se divide la gama cromática y tu propia tonalidad, es momento de saber cuáles les van mejor a quiénes. Marco Sándor, recomienda:
- Todas las pieles se ven beneficiadas por los neutros. Son como los comodines en una paleta de maquillaje.
- Si eres de tendencia fría opta por el oro blanco y la plata; en pelo, úsalo negro, gris, lila, rojo o rubio cenizo (evita los amarillos). En ropa y accesorios, cerca del rostro viste los que contengan azul o subtonos azules.
- Si resultaste de grupo cálido, el oro amarillo se te ve mejor. En tintes, prueba el anaranjado, rojo fuego o rubio dorado. Mientras que al elegir tu guardarropa, dale preferencia al amarillo y sus subtonos.
Comprender qué colores te favorecen no es solo una cuestión estética, sino también una herramienta poderosa para mejorar tu autoimagen. La colorimetría proporciona un marco claro para guiarte en la elección de tus colores. Al explorar y experimentar con tu paleta perfecta, no solo podrás realzar tu belleza natural, sino también desarrollar un estilo que manifieste tu personalidad.