El retinol es un ingrediente increíblemente poderoso que ha conquistado el universo de la belleza. ¿Pero sabías que su uso puede tener tanto beneficios como algunos inconvenientes?
Si bien, prácticamente, no hay línea de tratamientos antiedad que no incluya este ingrediente, hay que saber cómo y cuándo usarlo, para poder aprovechar sus propiedades.
Lo primero es entender qué es el retinol, se trata de otro nombre para la vitamina A. Hay muchos derivados de esta vitamina y retinol es el nombre de la forma pura.
Como la vitamina A no es producida naturalmente por el cuerpo, aplicarla de manera tópica sobre la piel es la mejor forma de recibir sus beneficios. ¿Y cuáles son éstos? Aquí te lo decimos:
Beneficios
Entre la cualidad es que han hecho del retinol el ingrediente estrella de los productos antiedad, destacan:
- Reduce las manchas de pigmentación: El retinol es conocido por su habilidad para disminuir las manchas oscuras y la apariencia de una tez desigual.
- Estimula la producción de colágeno y elastina: Este poderoso ingrediente activa la producción de colágeno y elastina, lo que resulta en una piel firme y con menos arrugas.
- Disminuye las arrugas, líneas finas y piel flácida: Gracias a sus propiedades regenerativas, el retinol puede suavizar la apariencia de las arrugas y líneas de expresión, brindándote una piel más juvenil y tonificada.
- Combate el acné: Si sufres de acné, el retinol puede ser tu salvador. Este ingrediente ayuda a eliminar los brotes, reducir el enrojecimiento y prevenir nuevas imperfecciones.
- Mejora la textura de la piel: Al estimular la renovación celular, el retinol ayuda a suavizar la textura áspera de la piel, dejándola suave y radiante.
- Disimula el tamaño de los poros: Los poros dilatados pueden ser un problema para muchas mujeres, pero el retinol puede ayudar a reducir, visualmente, su apariencia, dejando la piel con un aspecto más refinado.
- Regula la producción de sebo: Si tienes la piel grasa, el retinol puede regular la producción de sebo, manteniendo a raya los brillos indeseados.
Contraindicaciones
Existen diferentes concentraciones de retinol, las más altas pueden ser muy agresivas con las pieles sensibles y, en esos casos, es mejor evitarlo. Por eso, antes de usarlo, considera visitar a in dermatólogo y pon atención a las recomendaciones siguiente:
- Aumenta la sensibilidad al sol: El retinol puede hacer que tu piel sea más sensible a los rayos del sol, lo que aumenta el riesgo de quemaduras solares y daños en la piel. Por eso, generalmente se recomienda usarlo de noche.
- Sensación de ardor o picazón: Algunas personas pueden experimentar una sensación de ardor o picazón después de usar productos con retinol, especialmente al principio.
- Sequedad, irritación o comezón de la piel: El retinol puede causar sequedad, irritación o comezón en la piel, especialmente si se utiliza en concentraciones más altas o si no se usa adecuadamente.
- Enrojecimiento y descamación de la piel: Al principio, es posible que notes enrojecimiento y descamación de la piel, pero esto es temporal y suele desaparecer a medida que la piel se acostumbra al retinol.
- Adelgazamiento de la piel: El uso prolongado y excesivo de retinol puede provocar un adelgazamiento de la piel, lo cual es importante tener en cuenta en pieles maduras.
Es fundamental tener en cuenta que el retinol es un ingrediente potente y puede causar irritación y otros efectos secundarios, especialmente si no se utiliza correctamente.
Se recomienda comenzar con una concentración baja de retinol y aumentar gradualmente la frecuencia de uso para permitir que la piel se ajuste.
También es importante utilizar protector solar durante el día para proteger la piel de los daños solares. Consultar con un dermatólogo o profesional de cuidado de la piel puede ayudar a determinar el mejor producto y régimen de retinol para cada tipo de piel y preocupaciones individuales.