Antes de cerrar la maleta para irte de vacaciones, recuerda empacar los productos que te ayudarán a cuidar tu piel; además, sigue estos consejos que facilitarán la recuperación posplaya.
PIEL
Piscina
Sin darte cuenta, tu mejor plan de relajación y escape de la rutina diaria podría afectar tu piel; para que no sufras irritación después de sumergirte a la alberca, hay que seguir algunos sencillos pasos que no te tomarán demasiado tiempo, pero que, sin duda, harán una gran diferencia, y es que como sabes, las piscinas contienen cloro para mantenerlas higiénicas; sin embargo, esta sustancia química que mantiene limpia el agua suele afectar el estado de salud de la dermis.
● Procura aplicar un filtro solar que sea resistente al agua para que tengas mayor protección.
● Después de refrescarte en la piscina es fundamental que te enjuagues con agua natural, para eliminar los restos de cloro que permanecen en el cuerpo y cara, ya que éstos suelen irritar la piel, provocar comezón, inflamación y peor aún: hasta manchas.
● No olvides reaplicar el bloqueador después de nadar o enjuagarte.
● Al finalizar la jornada evita los exfoliantes profundos que desbalancearán tu pH. Son mejores los limpiadores suaves e hidratantes.
LIMPIADORA HIDRATANTE SIN PERFUME, CERAVE.
● Durante la noche necesitas una crema reparadora y humectante con ingredientes naturales, como ésta que contiene flor de loto, extracto de hoja de durazno para recuperar frescura y aceite de flor de manzanilla para calmar.
En el aire
Si este viaje lo llevarás a cabo en avión, también tienes que tomar precauciones y cuidados, pues al volar nuestra piel se reseca en extremo, por eso te recomendamos:
1. Ingerir por lo menos tres litros de agua durante el día.
2. Llevar una mascarilla que puedas usar mientras estés volando.
3. Aplicar bloqueador solar si tu asiento está en la ventana, pues estarás más cerca de los rayos.
Rayos solares
Es seguro que has visto que en los productos que cuentan con protección se indican dos tipos de radiación: UVA o UVB, pero ¿cuál es la diferencia entre ambas?
Los segundos son los que producen el bronceado y son tan potentes que pueden atravesar la ropa, además de ser causantes de cáncer de piel; por eso, es importante reaplicar el bloqueador cada dos horas.
Por su parte, los primeros no se sienten ni se ven (es decir: no provocan ‘ardor’ o molestias), pero tienen una gran capacidad de penetración, por lo que dañan las células y provocan el envejecimiento, el cual se traduce en arrugas y manchas en el rostro.
● El primer paso es siempre utilizar un protector solar que cubra ambos rayos solares, solamente debes fijarte que se indique en el FPS.
● Si no puedes prescindir del maquillaje, opta por una CC Cream que contenga factor de protección solar, así será más ligera que una base de maquillaje, corregirá imperfecciones y te protegerá de la dañina radiación.
● ¡No olvides proteger tus labios! Elige un lip balm con FPS y un bálsamo con ingredientes, como la manteca de karité.
● Los lentes de sol son una barrera que resguarda la parte baja y contorno de los ojos, la zona en la que la piel es mucho más delgada y sensible del rostro.
En el mar
La buena noticia es que sumergirte en el océano no es dañino para tu piel, por el contrario, puede resultar beneficioso, y es que, además de ser relajante y refrescarte, puede mejorar tu aspecto, pues se encuentra repleta de minerales (cuyas propiedades curativas son altísimas), que tu cuerpo absorberá. Seguramente te ha sucedido que al pasar un rato en el mar, cortadas y heridas pequeñas sanan, esto es gracias al contenido de yodo, cloruro de potasio y sal.
PELO
Cloro
Las puntas sanas y una melena con brillo se obtienen con constancia en el cuidado capilar, ¡que no debe de olvidarse en las vacaciones!
Para comprender el funcionamiento de tu cabellera debes saber que la capa externa de cada hebra -llamada cutícula- lo protege de las agresiones externas, ya sean los químicos, la contaminación, las herramientas de calor o los rayos solares. E
l contacto excesivo con los factores mencionados puede llegar a debilitar las capas del pelo y fomentar la pérdida de agua y lípidos, quebrando las puntas y dejándolo áspero y seco; por eso debes protegerlo aún más durante los días de exposición al sol, cloro y agua salada.
Los mismos efectos y consecuencias que tienen estos químicos en la dermis los tendrás en tu cabellera. Debido a ello, las personas que practican deportes acuáticos, como natación o clavados, siempre llevan una gorra para evitar (en la medida de lo posible) el contacto con el agua, ya que el cloro remueve los aceites naturales del pelo, dejándolo mucho más seco y poroso.
● Restaura tu cabello con mascarillas enfocadas en la fortaleza y reparación, aplícala por lo menos dos veces a la semana y déjalas actuar como mínimo durante 10 minutos para que notes la diferencia.
● Si tienes el pelo teñido sabrás que entre más lavadas y exposición a agentes externos, como químicos y en este caso, el cloro, el color puede dañarse, transformarse o perder vitalidad e intensidad.
● Elige un shampoo y acondicionador que ayude a preservar la coloración durante mayor tiempo. Hoy día existe uno especializado para cada tono, desde rubios y platinados, hasta negros.
TIP: Existe un truco de los nadadores para evitar que la cabellera se dañe con los químicos: consiste en mojar previamente todo el pelo con agua natural (sin cloro ni sales), para que al momento de entrar en la alberca ya no absorba o por lo menos sea menor la cantidad de H2O con sustancias que penetren en la melena.
Agua salada
El efecto del agua de mar dependerá del tipo de melena que tengas, las de normal a grasa no tendrán daño alguno, de hecho les puede favorecer; no por nada muchos productos de styling están compuestos por sal marina, pues aporta volumen y textura, ayudando a conseguir las beach waves.
Por otro lado, si tu pelo es seco, es preferible que reduzcas la exposición, ya que el PH es muy elevado y puede restarle brillo y resecarlo.
Radiación solar
Los famosos rayos UVA y UVB también afectan el pelo, y es que modifican su apariencia desde la textura hasta la luminosidad.
● Las medidas que puedes tomar son: aplicar un producto enfocado en proteger tu pelo del sol, como un aceite que, además, lo mantendrá hidratado.
● Añade tratamientos dentro de tu rutina diaria para humectar las puntas al máximo, como este acondicionador que se deja reposar durante tres minutos y cuyo objetivo es la hidratación extrema.
● Además de ser el complemento ideal para el look de playa, los sombreros, gorras y viseras te ayudarán a cubrir el pelo del sol.
TIP: En estas vacaciones permite que tu pelo descanse de la agresiva secadora; mejor deja que el aire cálido se encargue de todo el trabajo, así evitarás que se reseque o que las puntas se abran.
