Las exigencias de la vida actual nos obligan a tener días ocupados y agendas llenas. Y cuando se multiplican nuestras actividades, no siempre nos da tiempo de arreglarnos si debemos acudir a un evento nocturno. No necesitas ser una experta maquillista para cambiar de un look de maquillaje de día a uno de noche, pero sí debes poner atención a los detalles y trucos.
Aprende lo necesario para crear un look que se adapte a tu jornada, de este modo no tendrás que desmaquillarte y empezar de cero.
Cómo lograr un rápido maquillaje de día
- Prepara: Lo primero es preparar la piel, porque será el lienzo sobre el cual trabajaremos. Hidrata, pon corrector en las imperfecciones y aplica una base o una BB cream adecuada a tu tono y tipo de piel.
- Levanta: Rizar tus pestañas ayudará a que tus ojos se vean más abiertos y vivaces. No necesitas aplicar producto sobre ellas.
- Enmarca: Para las cejas, utiliza un gel en su mismo tono o uno traslúcido, y cepilla con suavidad hacia arriba. Acomoda los pelitos que sobresalgan con movimientos en dirección al final del arco.
- Resalta: Con una sombra para ojos en formato crayón dibuja una línea gruesa en todo el contorno de las pestañas superiores, lo más cerca de la línea de éstas. Este formato generalmente es cremoso, de larga duración y muy pigmentado.
- Difumina: Con ayuda de un pincel de cerdas cortas y redonditas, haz que el trazo del paso anterior adquiera una apariencia ahumada.
- Ilumina: Para que tu mirada se vea más luminosa y despierta, el truco está en colocar poco de iluminador en crema en el lagrimal con ayuda de un pincel limpio.
- Destaca: Usando el mismo iluminador en crema, coloca un poco de iluminador en punto estratégicos más alto de los pómulos, en el corazón de los labios y en el tabique de la nariz, puedes hacerlo con la yema de los dedos.
- Realza: Ahora sí, aplica la máscara para pestañas. Usa tu técnica preferida.
- Colorea: Sobre tus mejillas, emplea un rubor rosado o salmón con un efecto nacarado, que proporcionará más vida. Usa una brocha redonda con cerdas largas y suaves, que facilite la difuminación del color y le dé un acabado natural.
- Pinta: Termina el look con un labial mate de larga duración. Es importante escoger un lipstick nude te permitirá reemplazarlo para la noche; uno muy saturado dejará residuos de color cuando quieras aplicar otro.
Tips de experta
Para conseguir un resultado perfecto, pon atención a los detalles:
- Calentar un poco el enchinador hace que el efecto sea más duradero, pero debes tener cuidado de que no sea a una temperatura muy elevada, ya que la piel alrededor de los ojos son la más delicada y las pestañas más delgadas que el resto del cabello.
- Un error común es arrastrar el color hacia abajo y parecer mapache. Cuida la posición del pincel. Lo adecuado es mantenerlo ligeramente levantado. De lo contrario es muy fácil que el pigmento vaya hacia esa dirección, evita usarlo apuntando la parte inferior hacia abajo.
- Del día a la noche, si tu piel se siente grasa, puedes eliminar el exceso de sebo con toallitas de papel absorbente, después usa una bruma de fijador matizante y al final un poco de polvo fijador, para sellar.
Transforma tu maquillaje de día en uno de noche
- Remarca: Para la noche, la clave es hacer tu look más intenso. Con un delineador cremoso remarca toda la parte inferior del ojo.
- Intensifica: Añade más capas de máscara de pestañas; dará énfasis a tus ojos y hará que se vean más dramáticos.
- Acentúa: Da el toque final con un labial rojo mate o lustroso. Usa uno muy pigmentado y de larga duración.
Con estos trucos sencillos podrás transformar tu maquillaje de día en uno de noche de forma rápida. Y lo mejor, no necesitarás llevar un maletín de cosméticos y brochas. Toma nota: la clave para un look de noche perfecto es la intensidad y el color.