La época del verano aunque suele ser una gran oportunidad para lucir tus mejores looks de playa y broncearse (eso sí, siempre usando bloqueador), sin embargo, el agua con cloro, la sal de mar y otros factores pueden dañar tu melena. Para que eso no te pase, te vamos a contar 3 simples pasos para prevenirlo.
1. Hidrata y protege
- Opta por champús y acondicionadores hidratantes para mantener tu cabello bien nutrido. Busca productos que contengan ingredientes como aceite de coco, argán, o manteca de karité.
- Aplica una mascarilla capilar hidratante al menos una vez a la semana. Esto ayudará a reponer la humedad perdida y fortalecer el cabello.
- Usa productos capilares que contengan protección UV para proteger tu pelo de los rayos solares. Los sprays y cremas con filtros UV crean una barrera contra el sol, similar a cómo los protectores solares funcionan en la piel.
- Reduce el uso de secadores, planchas y rizadores. Si necesitas usarlos, asegúrate de aplicar un protector térmico antes.
- Siempre que sea posible, deja que tu melena se seque al aire libre. Si necesitas secarlo rápidamente, usa el secador en la configuración de aire frío.
- Opta por peinados que protejan tu cabello del sol y el calor, como trenzas, moños o colas de caballo. Estos estilos también pueden reducir el frizz y mantener el cabello ordenado.
3. Protección física
- Utiliza sombreros de ala ancha o pañuelos para proteger tu cabello del sol directo. Esto no solo protege tu cabello, sino también tu cuero cabelludo y rostro.
- Antes de nadar, moja tu cabello con agua corriente y aplica un acondicionador sin enjuague para crear una barrera protectora. Después de nadar, enjuaga tu cabello inmediatamente para eliminar cualquier residuo de cloro o sal.
- Usa un peine de dientes anchos para desenredar tu cabello cuando esté mojado, ya que es más frágil en este estado. Cepilla con suavidad para evitar roturas y daños.
¿Por qué el verano daña el pelo?
De acuerdo con Smart Clinic, la sal del mar, el cloro, los rayos solares y una alimentación más descuidada, dañan el cuero cabelludo y el cabello. Esto también pueden debilitar el pelo y quebrarlo, provocando su caída, de ahí la importancia que tomes cartas en el asunto para conservar una melena suave y saludable.