Si ya incluyes colágeno en tu dieta y en tus rutinas de belleza, es momento que te sumes a una nueva tendencias: Collagen Banking, que es lo mismo que un Banco de Colágeno. Recuerda que esta proteína es esencial para la salud de la piel, los huesos, los músculos y otros tejidos del cuerpo. Si quiere un una piel luminosa por más tiempo, esta inversión te interesa.
¿Por qué necesitamos colágeno?
El colágeno es fundamental para el cuerpo debido a su papel crucial en la estructura y función de diversos tejidos. “El colágeno es una proteína responsable de la salud de las articulaciones y de la elasticidad o elasticidad de la piel. Está en los huesos, los músculos y la sangre y constituye tres cuartas partes de la piel y un tercio de las proteínas del cuerpo”, explica el portal WebMD.
Aunque el cuerpo lo produce de manera natural, a medida que envejecemos, disminuye la cantidad y la calidad. A medida que falta, el cuerpo presenta problemas como la pérdida de elasticidad y flexibilidad de la piel, dolores en las articulaciones y músculos, osteoporosis, entre otros. De ahí el reciente furor por suplementos, cremas para café, polvos para batidos y smoothies, barritas con proteína, gomitas y el furor por el caldo de huesos.... todo con colágeno y todo con el objetivo de mantener niveles adecuados de este elemento.
Naturalmente, cómo ayudar al cuerpo a producir colágeno
La respuesta es sencilla: ¡con una alimentación balanceada! La doctora Jabeen Begum, de WebMD, recomienda incluir:
- Prolina: Está en las claras de huevo, los lácteos, los champiñones y los espárragos.
- Glicina: La encuentras en la piel de cerdo y de pollo, y la gelatina, principalmente.
- Vitamina C: Disponible en el Kiwi (alimento que puede hacerte feliz) y los cítricos.
- Zinc: Presente en la carne de res, de cordero, de cerdo, asì como en garbanzos, lentejas y frijoles.
- Cobre: Lo puedes conseguir del cacao en polvo, nueces de la India y lentejas.
Cómo almacenar colágeno
Collagen Banking es un método para almacenar colágeno en el cuerpo para ralentizar el proceso de envejecimiento de la piel. Algo así como unas reservas de juventud. Implica tomar medidas para preservar y aumentar los niveles de colágeno mientras el cuerpo aún lo produce de manera natural, con el objetivo de mantener la firmeza y elasticidad.
Lo ideal es que este proceso se inversión lo comiences entre los 20 y 30 años, que es cuando tu cuerpo produce buenas cantidades de colágeno. De acuerdo a Glowday, la teoría respaldaría que “si construimos un “banco” de colágeno mientras nuestros cuerpos todavía son eficientes para producirlo, suavizaremos el golpe cuando nuestro suministro natural comience a disminuir y mantendremos nuestra piel firme, tersa y de aspecto joven”.
- Productos para el cuidado de la piel: Incorporar productos para la piel que estimulen la producción de colágeno, como aquellos que contienen retinol, péptidos, ácido hialurónico y vitamina C.
- Suplementos de colágeno: Considerar la adición de suplementos de colágeno a la rutina diaria, ya que han demostrado beneficios en la producción de colágeno y la salud general de la piel.
- Terapia de luz roja: La terapia de luz roja, también conocida como terapia LED, es un tratamiento no invasivo que puede promover la producción de colágeno y mejorar la textura de la piel.
Es importante comenzar a considerar el “collagen banking” idealmente a partir de los 30 años, aunque nunca es tarde para empezar a preservar y aumentar los niveles de colágeno en el cuerpo. La clave es ser proactivo en el enfoque hacia almacenamiento de colágeno de forma efectiva, que puede ayudarte a mantener una piel joven, firme y radiante.